miércoles, 3 de abril de 2013

Por la puerta de la Universidad


En nuestro caminar, el tuyo y el mío, pasamos tres veces por la puerta de la Universidad. Los leones nos miraban incrédulos y llenos de curiosidad, giraban las pétreas bestias sus cabezas para vernos avanzar.

La primera vez que pasamos, parecía ser primavera. Todo era nuevo, tu eras reservado y yo tímida e ingenua. Ninguno sabía qué pasaba pero los dos sonreíamos con nuestras miradas. Parecía que naciese la vida de nuevo, todo estaba lleno de esperanza.

La segunda vez llovía intensamente, y bajo el paraguas estaba mi mirada atenta y tu avidez desapegada. Los dos sabíamos ya lo que queríamos, y esa era nuestra desgracia. Mi anhelo no encontró reflejo en tu alma, ni tu fuego pudo encontrarlo en mi mirada. Los dos cogimos las migajas que el uno al otro nos dábamos y celebramos un banquete a nuestras propias espaldas.

La tercera vez que por allí pasamos ya todo había muerto, no quedaba belleza en mi mirada ni anhelos en tu alma. Mi esperanza había sido estrangulada por tus manos y sin que yo dijese, si quiera, una palabra para salvarla. Tu fuego fue apagado por el odio de esa muerte ya esperada. Sólo llevábamos dolor, agonía y hartazgo en las manos, los bolsillos llenos de tierra, la boca hecha abrojos y el alma ya ausente, y ya seca. Pero fuimos una vez más a la puerta de la Universidad, a conjurar al destino, a gritar que un día hubo esperanza.

Y los leones seguían mirando incrédulos, sin entender nuestros caminos pero esta vez no giraron su cabezas para vernos avanzar...

viernes, 22 de marzo de 2013

Traiciones


La victoria completa se produce cuando el ejército no lucha, la ciudad no es asediada, la destrucción no se prolonga durante mucho tiempo, y en cada caso el enemigo es vencido por el empleo de la estrategia. (Sun Tzu, El arte de la guerra)


Todo el mundo, en su sensatez,
me previene contra ti.
Mientras yo, en mi locura,
conspiro para ti.

lunes, 11 de marzo de 2013

Por ver dónde nos llevan...


No quiero que te pienses que te quiero. Sólo “te quiero” para los versos que te escribo o te leo. “Te quiero” en las canciones que escucho pensando en ti o que canto para ti.

Pero no quiero mentirte: yo no te quiero.

No quiero mentirte sobre lo que siento pero no sé cómo nombrarlo, porque ni si quiera sé por qué a ti. Tal vez porque vino de la nada y camina hacia ningún sitio.

Quizá si aquel día en vez de “no” hubieras dicho “sí” todo sería distinto, entonces tal vez ya hubiera resuelto el misterio, o perdido el interés, o tú y yo hubiéramos acabado con las ganas, o eso y lo contrario a la vez...
Quizá si después de aquel día cuando dijiste “no” hubieses sabido negar el “sí”, yo hubiera entendido sólo lo que a veces dices y sólo lo que a veces haces, y no entendería también lo que otras veces haces y dices...

No quiero que creas que te quiero, porque no te quiero mentir.

No te quiero, porque nos falta mucho camino que andar, si ambos queremos, para poder conjugar el verbo amar. No te quiero, porque nos faltan muchas conversaciones que hablar y muchos silencios que disfrutar. No te quiero, porque nos faltan muchas horas de manos entrelazadas para acariciar.

No, no te quiero.

Pero para no mentir, también debo decirte que me muero de ganas de recorrer esos caminos que nos separan.

sábado, 2 de marzo de 2013

Adiós


Me dices adiós, pero no te vas.
Te quedas, mas no para mí.

jueves, 28 de febrero de 2013

Son sólo míos


Cuando la angustia de los nervios me respeta, me doy cuenta de que tu no eres responsable de mis deseos.

martes, 19 de febrero de 2013

Tirar la piedra y esconder la mano


Tirar la piedra y esconder la mano
Lanzas palabras como piedras, como dardos, como losas...
Tiras, pero no reparas.
Ensartas mi corazón en tus palabras,
y después te retiras tú y tu espada.


miércoles, 13 de febrero de 2013

Tenías razón, ya me convenciste


Tenías razón. Ya me convenciste.
Has conseguido demostrar que no errabas. Que tu juicio era certero. Que tus palabras eran sabias. Y tus afirmaciones son preclaras.
Sólo quiero decirte que hay algo en lo que te equivocabas. Y que persistes en tu error. Lo que te lleva a afirmar es erróneo. Todas esas situaciones externas e ineludibles a las que acudes, son paja que el viento se lleva. La verdadera razón eres tú. 
No se si es egoísmo, torpeza o miedo lo que te mueve así, sólo puedo decirte que, sin duda alguna, es algo dentro de ti.

jueves, 7 de febrero de 2013

Soñamos sobre la nada


Tu me sueñas en la ducha
y yo te sueño en la cama,
cada uno a su manera
soñamos sobre la nada.

miércoles, 6 de febrero de 2013

¡Cuánto me gustaría!

No sabes cuánto me gustaría poder agarrarte de las solapas y sacudirte fuerte, tan fuerte que se te quitase el polvo de la chaqueta. Poder descorrer las cortinas, abrirte la ventana y dejar pasar el aire fresco a toda tu casa. Cogerte la mano y sacarte bajo la lluvia, empaparnos hasta el alma, y dejar que todas nuestras tristezas se las lleve el agua. Reconstruirte de nuevo pero no cambiarte en nada. Esperar contigo a que salga el sol y la naturaleza renazca. Llenar la vida de vida.
Luego, si tú quisieras, me marcharía.

jueves, 31 de enero de 2013

Ojos hidrópicos creo que mis ojos deben ser...

Mientras veía en el internés una conferencia (interesantísima, por otro lado, de temas gafapastasdeletras jjj) me resonaba en la cabeza todo el rato:

Con cada vez que te veo
nueva admiración me das, 
y cuando te miro más 
aun más mirarte deseo.
Ojos hidrópicos creo
que mis ojos deben ser;
pues cuando es muerte el beber,
beben más, y desta suerte,
viendo que el ver me da muerte,
estoy muriendo por ver.
Pero véate yo y muera;
que no sé, rendido ya,
si el verte muerte me da,
el no verte qué me diera.
Fuera, más que muerte fiera,
ira, rabia y dolor fuerte;
fuera muerte; desta suerte
su rigor he ponderado,
pues dar vida a un desdichado
es dar a un dichoso muerte.
(La vida es sueño, Calderón)

Me sobran los últimos 4 versos (o no, no se sabe...) pero tengo clarísimo que las mujeres (al menos yo) somos masocas, autopunitivas y perdemos cualquier instinto de conservación en el amor (o cómo lo queramos llamar). Y aunque estos versos pertenecen a Segismundo, cabe la posibilidad de que fuesen parte del papel que él debe interpretar como hombre (inconscientemente ¿eh? que no digo yo que sea mala gente ¡ni mucho menos!), pero que al final la realidad es que sean (siendo sinceros) más propios de Rosaura, o de cualquiera de las rosauras que pueblan este planeta...

Aun así, no me queda otra que afirmar "pero véate" (y óigate) "yo y muera"...

miércoles, 30 de enero de 2013

Imaginando


El otro día, hablando de todo un poco con una religiosa y haciendo honor a que soy más mala que la quina, le decía que me gustaría que el Estado no le diera ni un solo céntimo más a la Iglesia. ¡¡Nada!! ¡Fuera la casilla de la declaración de la renta! ¡Fuera los colegios concertados de religiosos! ¡¡Todo fuera!! Pero no sólo en España ¡¡en el mundo entero!!

Quiero que por fin les den el gusto a los anticlericales (en esto al menos, los que deseen ponerse a quemar iglesias espero que recuerden lo que sucedió la última vez que se puso de moda...), que no haya nada de nada del Estado para la Iglesia. ¿Y para las ONGs de cualquier tipo y afición? Sí, sí, para esas sí. Sólo quiero que la Iglesia no tenga dinero para mantener su obra social. El que quiera curas que los pague, dicen, y aunque así lo hagamos ya, que quede claro...

Quiero, porque soy mala gente hasta límites insospechados (arderé en el Infierno porque no hay sitio peor, si no allí acabaría), que la Iglesia cierre todos sus comedores, sus albergues para indigentes, sus casas para madres, sus residencias de ancianos, sus hospitales, sus colegios, todos los dispensarios médicos (aquí y allende los mares), ¡¡TODO!! Lo quiero todo cerrado. Quiero darle gusto al personal que critica, que oye... a lo mejor tienen razón...

Pero de lo que más ganas tengo, debido al corazón reseco y atravesado que oculto en el pecho, es verles la cara cuando algún día necesiten de esa obra social, cuando el Estado diga que no puede asumir esa labor porque no hay dinero para hacerlo, cuando no haya plazas para escolarizar a sus niños, cuando sean viejos y no le importen a nadie y ninguna monja venga a darles la cena, cuando...

También quiero verles la cara (a los que tengan corazón) cuando se enteren de que los niños en la mayor parte de África vuelven a estar sin escolarizar, que de nuevo la mortalidad infantil asciende a un ritmo vertiginoso, que nadie cuida las leproserías ni a los terminales de SIDA, que nadie se hace cargo de los huérfanos, que los niños soldado no tienen ningún sitio a dónde ir, que...

Aunque la verdad es que lo que más me gustaría de todo, es que se librasen por un momento de su rabia, de sus miserias, e imaginasen todas estas cosas. Que la Iglesia con todos sus errores es un bien y que se uniesen al trabajo o se apartasen para no molestar...

lunes, 28 de enero de 2013

El cuerpo místico, cuerpazo diría yo...


Parafraseando a san Pablo y sacándolo de sus casillas...

Pues del mismo modo que el cuerpo es uno, aunque tiene muchos miembros, y todos los miembros del cuerpo, no obstante su pluralidad, no forman más que un solo cuerpo, así también España. Porque en un solo país hemos sido todos alumbrados, para no formar más que un cuerpo, madrileños y catalanes, castellanos y andaluces. Y todos hemos bebido de una sola historia.

Así también el cuerpo no se compone de un solo miembro, sino de muchos. Si dijera el pie: "Puesto que no soy mano, yo no soy del cuerpo" ¿dejaría de ser parte del cuerpo por eso? Y si el oído dijera: "Puesto que no soy ojo, no soy del cuerpo" ¿dejaría de ser parte del cuerpo por eso?
[Así de la misma manera, si dijera un catalán (o un millón) “puesto que no soy de Murcia no soy español”, ¿dejaría de ser español por eso?, si un vascuence dinamitase media España para demostrar que “puesto que no soy santanderino, no soy español”, ¿dejaría de ser español por eso?]

Si todo el cuerpo fuera ojo, ¿dónde quedaría el oído? Y si fuera todo oído, ¿dónde el olfato? Ahora bien, Dios puso cada uno de los miembros en el cuerpo según su voluntad.
[De este modo, si todos fuésemos extremeños ¿Qué sería de la gaita gallega? Y si todos fuésemos gallegos ¿qué sería de la jota aragonesa?]

Si todo fuera un solo miembro, ¿dónde quedaría el cuerpo? Por tanto, muchos son los miembros, mas uno el cuerpo. Y no puede el ojo decir a la mano: "¡No te necesito!" Ni la cabeza a los pies: "¡No os necesito!"
[Si todos fuésemos iguales ¿dónde quedaría nuestra riqueza cultural? Por tanto muchas son las autonomías, pero una sola España, y no puede decir Barcelona a Zaragoza “¡No te necesito!” Ni Madrid a Valencia “¡No te necesito!”]

Más bien los miembros del país que tenemos por más débiles, son indispensables.
Y a los que nos parecen los más viles del cuerpo, los rodeamos de mayor honor. Así a nuestras partes deshonestas las vestimos con mayor honestidad. Pues nuestras partes honestas no lo necesitan. Dios ha formado el cuerpo dando más honor a los miembros que carecían de él, para que no hubiera división alguna en el cuerpo, sino que todos los miembros se preocuparan lo mismo los unos de los otros. [El devenir de la historia ha formado España dando algunas veces la riqueza de una zona a otras, para no hubiera división, sino que todos nos preocupemos los unos por los otros] Si sufre un miembro, todos los demás sufren con él. Si un miembro es honrado, todos los demás toman parte en su gozo.

Ahora bien, vosotros sois el cuerpo místico de España, y sus miembros cada uno a su modo.

El texto bueno: I Carta de San Pablo a los Corintios, 12, 12-30 (justo antes del Himno a la Caridad)

sábado, 27 de agosto de 2011

Por fi, por fi... ^^

He presentado a Muchomejor (obra social de Reale Seguros) el Centro de día Amani, un centro de día para menores en riesgo de exclusión social en el barrio de Vallecas. Os pido que, por favor, votéis por este proyecto y que lo paséis a vuestros contactos para que mucha más gente vote.

Si queréis votar tenéis que hacer click en en link, darle a saltar intro (arriba a la derecha) y esperar unos segundos, saldrá la página de Amani y ahí hay que darle al corazón, así contabilizará un voto. Podéis votar de vez en cuando, no es sólo un voto por persona. Y para pasarlo a vuestros contactos y que más gente pueda ayudar a los niños que forman parte del proyecto de Amani, podéis copiar este mensaje y reenviarselo a vuestros contactos, y así hasta el infinito...

sábado, 2 de abril de 2011

Viaje al Parnaso


Y él a mí dijo: ¡Oh sobrehumano y sobre

espíritu cilenio levantado,

toda abundancia y todo honor te sobre!

Que, en fin, has respondido a ser soldado

antiguo y valeroso, cual lo muestra

la mano de la que estás estropeado.

Bien sé que en la naval dura palestra

perdiste el movimiento de la mano

izquierda, para gloria de la diestra;

y sé que aquel instinto sobrehumano

que de raro inventor tu pecho encierra

no te le ha dado el padre Apolo en vano.

Tus obras los rincones de la Tierra,

llevándola en grupa Rocinante,

descubren y a la envidia mueven guerra.

Pasa, raro inventor, adelante

con tu sotil disinio, presta ayuda

a Apolo, que la tuya es importante,

antes que el escuadrón vulgar acuda

de más de veintemil sietemesinos

poetas que de serlo están en duda.

(Miguel de Cervantes)

miércoles, 29 de septiembre de 2010

Caperucita y el lobo feroz machista (APR)


Hoy me he levantado con talante. Como después de haber publicado El pequeño hoplita –un cuento sobre un niño en las Termópilas, que tanto debe a su magnífico ilustrador, Fernando Vicente– le tomé el gusto a la narrativa infantil, he decidido echar un cable. Ayudar a que nuestra ministra de Igualdad y Paridad, Bibiana Aído, rubia joya de la corona, haga realidad su bonito proyecto de conseguir que los cuentos tradicionales para pequeños cabroncetes sean desterrados de escuelas y hogares, y dejen de ser un reducto machista, sexista y antifeminista. O que, expurgados y reconvertidos a lo social y políticamente correcto, contribuyan, ellos también, a la formación de futuras generaciones de ciudadanos y ciudadanas ejemplares y ejemplaras. Como está mandado.

Al principio pensaba hacerlo con el cuento de Blancanieves y las siete personas de crecimiento inadecuado; que, como sostiene Bibiana, requiere, título aparte, una remodelación general urgente. Pero ciertos indicios de intolerable violencia machista en la casita del bosque, como que sea una mujer quien cargue con todas las labores del hogar, o que no haya paridad de sexos en el número de individuos que trabajan en la mina –su número impar complica además el asunto–, me decidieron a dejarlo para más adelante. Lo intenté luego con La soldadita de plomo y ploma; y no es por echarme flores, pero lo tenía casi resuelto. Una soldadita de plomo de la ULFF –Unidad Legionaria Femenina Feroz–, terror de los talibanes afganos y de los piratas del Índico, impedida en su extremidad locomotriz por haber caído poco metal en el molde cuando la fundían. O sea, incompleta física de una pierna, para entendernos. O no. Lo que antes se decía, en jerga fascista, coja. Y que, desde su repisa en el cuarto de juegos de una niña, se enamora de un bailarín de ballet de papel maché que está enfrente, puesto tal que así, de puntillas, y que tiene una bonita lentejuela de plata en el prepucio. Se lo leí a mi hija por teléfono, a ver qué tal iba la cosa; pero al llegar a lo de la lentejuela me aconsejó dejarlo. Te van a malinterpretar, dijo. Así que al final me decidí por un clásico inobjetable: Caperucita Roja. Y está feo que lo diga, pero la verdad es que lo he bordado. Creo.

Caperucita Roja camina por el bosque, como suele. Va muy contenta, dando saltitos con su cesta al brazo, porque, gracias a que está en paro y es mujer, emigrante rumana sin papeles, magrebí pero tirando a afroamericana de color, musulmana con hiyab, lesbiana y madre soltera, acaban de concederle plaza en un colegio a su hijo. Va a casa de su abuelita, que vive sola desde que su marido, el abuelito, le dio una colleja a Caperucita porque no se bebía el colacao, ésta lo denunció por maltrato infantil, y la Guardia Civil se llevó al viejo al penal de El Puerto de Santa María, donde en espera de juicio paga su culpa sodomizado en las duchas, un día sí y otro no, por robustos albanokosovares. Que también tienen sus necesidades y sus derechos, córcholis. El caso es que Caperucita va por el bosque, como digo, y en éstas aparece el lobo: hirsuto, sobrado, chulo, con una sonrisa machista que le descubre los colmillos superiores. Facha que te rilas: peinado hacia atrás con fijador reluciente y una pegatina de la bandera franquista, la de la gallina, en la correa del reloj. Y le pregunta: «¿Dónde vas, Caperucita?». A lo que ella responde, muy desenvuelta: «Donde me sale del mapa del clítoris», y sigue su camino, impasible. «Vaya corte», comenta el lobo, boquiabierto. Luego decide vengarse y corre a la casa de la abuelita, donde ejerce sobre la anciana una intolerable violencia doméstica de género y génera. O sea, que se la zampa, o deglute. Y encima se fuma un pitillo. El fascista. Cuando llega Caperucita se lo encuentra metido en la cama, con la cofia puesta. «Que sistema dental tan desproporcionado tienes, yaya», le dice. «Qué apéndice nasal tan fuera de lo común.» Etcétera. Entonces el lobo le da las suyas y las de un bombero: la deglute también, y se echa a dormir la siesta. Llegan en ésas un cazador y una cazadora, y cuando el cazador va a pegarle al lobo un plomazo de postas del doce, la cazadora contiene a su compañero. «No irás a ejercer la violencia –dice– contra un animal de la biosfera azul. Y además, con plomo contaminante y antiecológico. Es mejor afearle su conducta.» Se la afean, incluido lo de fumar. Malandrín, etcétera. Entonces el lobo, conmovido, ve la luz, se abre la cremallera que, como es sabido, todos los lobos llevan en la tripa, y libera a Caperucita y a su provecta. Todos ríen y se abrazan, felices. Incluido el lobo, que deja el tabaco, se hace antitaurino y funda la oenegé Lobos y Lobas sin Fronteras, subvencionada por el Instituto de la Mujer. Fin.

Arturo Pérez-Reverte (XLSemanal; 30-05-2010)

Lo he copiado tal cual (imagen incluida) de un blog que me he encontrado trasteando, es que mancantao... ^^

viernes, 30 de julio de 2010

Ricardo III

¡Ah, conciencia cobarde, cómo me afliges! Las luces arden como llama azul. Ahora es plena medianoche. Frías gotas miedosas cubren mi carne temblorosa. ¿Qué temo? ¿A mí mismo? No hay nadie más aquí: Ricardo quiere a Ricardo; esto es, yo soy yo. ¿Hay aquí algún asesino? No; sí, yo lo soy. Entonces, huye. ¿Qué, de mí mismo? Gran razón, ¿por qué? Para que no me vengue a mí mismo en mí mismo. Ay, me quiero a mí mismo. ¿Por qué? ¿Por algún bien que me haya hecho a mí mismo? ¡Ah no! ¡Ay, más bien me odio a mí mismo por odiosas acciones cometidas por mí mismo! Soy un rufián: pero miento, no lo soy. Loco, habla bien de ti mismo: loco, no adules. Mi conciencia tiene mil lenguas separadas, y cada lengua da una declaración diversa, y cada declaración me condena por rufián. Perjurio, perjurio, en el más alto grado; crimen, grave crimen, en el más horrendo grado; todos los diversos pecados cometidos todos ellos en todos los grados, se agolpan ante el tribunal gritando todos: "¡Culpable, culpable!" Me desesperaré. No hay criatura que me quiera: y si muero, nadie me compadecerá; no, ¿por qué me habían de compadecer, si yo mismo no encuentro en mí piedad para mí mismo?
La tragedia de Ricardo III, William Shakespeare

lunes, 26 de julio de 2010

No tengo corazón...

Dices que tienes corazón, y sólo
lo dices porque sientes sus latidos.
Eso no es corazón...; es una máquina,
que, al compás que se mueve, hace ruido.
(Gustavo Adolfo Bécquer)


A juzgar por todos los "ay pobre..." que estoy oyendo últimamente, concluyo que Bécquer escribió esto para mi.
Qué le voy a hacer... tiene su aquel que Bécquer me escribiera un poema :)

To be or not to be... That's not your question!

Me pregunto en qué momento exacto alguien decide que es mejor convertir a otro en una idea, que intentar conocerle.
Es en ese momento exacto, en el que nada de lo que haces tiene ningún significado para el de enfrente. Es en ese momento justo en el que dejas de existir. Y una imagen que casa con las expectativas de otro te sustituye en el universo.
Puede tener sus ventajas no lo niego… Si alguien se enamora de ti, bueno de ese ti en el que no estás tú incluido, siempre estará enamorado (siempre y cuando a ti te valga ese amor) por que nada le hará cambiar de opinión sobre ti (sobre ese ti que no eres tú).
Pero llega a ser desconcertante. Es extraño que alguien te hable y te trate como si fueras alguien diferente de quien eres, nada encaja: ni de lo que te habla, ni cómo lo hace, ni el vocabulario, ni las respuestas que das encajan en la conversación. Si te empeñas en seguir siendo tú y en seguir existiendo, entonces también es desconcertante para quién te ha hecho dejar de existir. Ahora es tu conversación, tus modos, tus respuestas y preguntas las que no encajan… aunque estos prestidigitadores del ser tienen la capacidad de retorcer u obviar la realidad, la sacrifican en aras de su idea y todo arreglado, el desconcierto dura solo unos segundos, de nuevo todo vuelve a su cauce.
Estos asesinos de identidades son doblemente peligrosos. Por un lado te dejan sin ser y te convierten en aquello que no eres, y por otro lado, parecen suaves y dóciles, incapaces de matar una mosca. Sin embargo si algún día te rebelas contra su tiranía y reclamas tu propia identidad, entonces enojados y realmente desconcertados, pensarán que estás completamente enajenado. Que de repente has dejado de ser quién eras, que te has vuelto loco y que no pueden entenderte, quizá alguno te diga que no eres quién conoció o te acuse de haberle engañado deliberadamente pareciendo ser una persona mejor de la que eres.
Solo caben ya dos cosas:
-preguntarse si son conscientes y por lo tanto culpables del homicidio que comenten o son absolutamente inocentes por incapaces
-salir corriendo lo más rápido y más lejos que podamos cuando uno de ellos se nos acerque

viernes, 25 de junio de 2010

¿Dónde pongo lo hayado?



¿Dónde pongo lo hallado?
En las calles, los libros,
la noche, los rostros
en que te he buscado.

¿Dónde pongo lo hallado?
En la tierra, en tu nombre,
en la Biblia, en el día
que al fin te he encontrado.

¿Qué le digo a la muerte tantas veces llamada a mi lado
que al cabo se ha vuelto mi hermana?

¿Qué le digo a la gloria vacía de estar solo
haciéndome el triste, haciéndome el lobo?

¿Qué le digo a los perros que se iban conmigo
en noches pérdidas de estar sin amigos?

¿Qué le digo a la luna que creí compañera
de noches y noches sin ser verdadera?

¿Qué hago ahora contigo?
Las palomas que van
a dormir a los parques
ya no hablan conmigo.

¿Qué hago ahora contigo?
Ahora que eres la luna,
los perros,las noches,
todos los amigos...

martes, 20 de abril de 2010

Oro :)

Para perfeccionarme, no debo olvidar ni por un solo momento, que debo estar al servicio del mundo.
Jigoro Kano
Campeonato de España Universitario 2010 :)
¡¡Gracias a todos, compis!!