Nada importa

No importa si eres buena o mala,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si dices verdad o mientes,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si tu trabajo es original o corta y pega,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si trabajas por el Evangelio o por ti,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si sirves a las personas o las utilizas,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si sanas o hieres,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si eres sencilla o retorcida,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si te das o eres egoísta,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si te conoces o eres una desconocida,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si amas o maltratas a los pequeños,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si eres de verdad o solo una máscara,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si ayudas a volar o colocas grilletes,
Dios te seguirá queriendo.
No importa cuanto bien o cuanto mal hagas,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si evangelizas o desmereces la Palabra,
Dios te seguirá queriendo.
No importa si eres fiel o te vendes a la gloria vana,
Dios te seguirá queriendo.

No importa nada de nada,
nada de lo que hagas,
nada de lo que digas,
nada de lo que pienses,
Dios te seguirá queriendo.

Todo lo que hagas es fundamental,
todo lo que digas es fundamental,
todo lo que pienses es fundamental,
para saber si tú le amas a Él.